Paso 1: fortalece el pecho
Cuatro días por semana, ponte una mochilla pesada y haz una serie de flexiones hasta el fallo. A continuación, haz una serie de flexiones asimétricas, con una mano en el suelo y la otra sobre una caja pequeña. Después de 5-10 repeticiones, cambia de mano y repite. Ahora aparta la caja y haz flexiones con las manos juntas hasta el fallo. Descansa. Repite todo 5 veces.
Paso 2: mejora el equilibrio
Las posiciones estáticas mejoran la memoria muscular y aumentan la fuerza del core. Ponte en la posición de hacer flexiones, con los pies separados el doble del ancho de los hombros. Levanta una mano y póntela detrás del muslo. Aguanta al menos 15 segundos, o hasta el fallo. Luego descansa. Haz de 3 a 5 series, 4 días por semana.
Paso 3: ¡a por ello!
Separa los pies bastante. Apoya una mano en el suelo por debajo del hombro y pon la otra detrás del muslo. Tensa todo el cuerpo. Baja el pecho al suelo al tiempo que giras el codo, el hombro y la palma hacia el cuerpo. Cuando llegues abajo, empuja fuerte para subir otra vez.
Paso 4: haz que parezca fácil
¿Te ha costado mucho tu primer intento? Practica varias veces al día, 4 días por semana, para aumentar tu fuerza, estabilidad y memoria muscular. |